Saturday, February 16, 2013

ISRAEL

Crecer con conocimiento
Tomado del Exportador ICEX
En términos de PIB, Israel es, actualmente, la cuarta economía de Oriente Próximo, por delante de la de Egipto, Argelia o Marruecos, y cercana a la de Irán, aunque aún a notable distancia de la de Arabia Saudí y Turquía. Pero hay un pequeño detalle que es necesario tener en cuenta: su población es mucho más reducida -7,8 millones de habitantes, mientras el menos poblado del resto de países citados, Arabia Saudí, cuenta con 28 millones- y sus recursos naturales son muy escasos.

Sus grandes ventajas cualitativas son su desarrollo tecnológico y su nivel educativo. El país invierte en I+D un 4,5% del PIB, el porcentaje más alto del mundo, por encima de otras grandes potencias como EEUU, Japón, Corea del Sur, Finlandia o Suecia. En Israel se crean unas 500 compañías tecnológicas al año y es el país extranjero con el mayor número de empresas cotizando en el índice Nasdaq de la Bolsa de Nueva York.
En Israel, el hecho de que la economía esté basada primordialmente en la tecnología y en el desarrollo del conocimiento, ambos aspectos reforzados por una gran capacidad de iniciativa de su población y por un fuerte estamento empresarial, se considera un factor genuinamente estructural y no algo que responde a la coyuntura de un determinado ciclo económico.
Todo ello significa que, más allá de la inestabilidad de la zona y del conflicto que mantiene con sus vecinos árabes por la cuestión palestina, su economía se encuentra muy bien preparada para competir en los mercados internacionales y especialmente favorecida en comparación con la de otros muchos países
 
Economía saneada
Si hay algo destacable en la situación actual de la economía israelí es su éxito al sortear la crisis mundial con mayor eficacia que las grandes economías del planeta. Su verdadera recesión tuvo lugar entre los años 2000 y 2003, a causa de la Segunda Intifada palestina. Pero, desde entonces, el período de expansión económica ha sido el más largo y sólido de la historia de Israel.
El PIB creció en 2011 un 4,7% y un 3,5% en 2012, debido al aumento de la demanda interna y, dentro de ella, gracias especialmente al componente de la inversión, además de al consumo privado. El PIB per cápita en 2011, en paridad del poder adquisitivo, fue de 31.000 dólares, superior al español. Israel tiene una reducida tasa de paro y también de inflación, además de un déficit presupuestario relativamente moderado, aunque el aumento que experimentó en 2012 constituya un motivo de cierta preocupación. En cuanto al saldo por cuenta corriente, se está viendo afectado por el deterioro de la balanza comercial, debido a la disminución de las exportaciones por la desfavorable situación económica de sus clientes, que son, en su mayoría, los países desarrollados.
En todo caso, Israel mantiene un sistema financiero saneado y muy conectado con el sector real de la economía, que no ha sufrido la crisis financiera mundial ni del mercado inmobiliario. Por otra parte, el país no esconde ningún déficit oculto por el coste de la partida de las pensiones, como ocurre en otros países.
Integración comercial
La economía israelí se encuentra muy integrada en el comercio internacional y está muy abierta al exterior. La suma de exportaciones e importaciones de bienes y servicios en relación con el PIB alcanza el 70%, lo que se considera una cifra muy elevada.
En lo que se refiere al régimen de comercio con España, nuestro país ha de ceñirse a lo estipulado en el Acuerdo Euromediterráneo de Asociación UE-Israel, firmado en 1995 y que entró en vigor en junio de 2000.
El acuerdo contiene disposiciones de liberalización recíproca en el área comercial: eliminación total recíproca de aranceles sobre productos industriales desde la entrada en vigor y, en productos agrícolas, una liberalización progresiva. En el caso de estos últimos, se concluyó formalmente un acuerdo en julio de 2008, que entró en vigor el 1 de enero de 2010, destacando el grado de ambición alcanzado y el resultado equilibrado para ambas partes. Este acuerdo mejora el acceso para los productos agrarios comunitarios al liberalizarse gran número de líneas arancelarias y abre contingentes con derecho nulo para muchos productos.
El acceso al mercado israelí no está exento, en todo caso, de dificultades, como ocurre con cualquier otro mercado. Una de las principales es el mantenimiento en vigor, por parte de Israel, de sus Reglas Obligatorias de 1995 sobre licitaciones, que favorecen ligeramente a las empresas locales en perjuicio de las extranjeras en los concursos de contratos públicos. La Administración concede una ventaja del 15% al productor local frente al importador.
Existen también restricciones veterinarias, que afectan a la carne y animales bovinos, así como barreras a las importaciones de alimentos y algunos productos textiles y de higiene que no cumplan con los requisitos kosher (de acuerdo con la religión judía).
Otro obstáculo no arancelario para exportar a Israel consiste en la necesidad de cumplir, en algunos casos, con determinada normativa propia diferente de la internacional. Así, es preceptivo obtener la certificación y homologación locales para poder comercializar un producto.
Por esta razón, y dado que Israel no convalida de manera automática los certificados emitidos por laboratorios europeos, es conveniente consultar con la Standards Institution of Israel (SII) los requisitos necesarios para poder llevar a cabo dichas operaciones. El asunto afecta a productos como la carne y otros alimentos, las partes de vehículos y las prendas de vestir, entre otros.
Dinamismo del mercado
Israel es un mercado muy competitivo y dinámico, en el que aparecen continuamente nuevos productos y empresas. Por esta razón, resulta esencial elegir adecuadamente al importador o agente local para conseguir la introducción más conveniente del producto. Normalmente, los empresarios locales suelen demandar la exclusividad para la distribución de bienes importados.
Habitualmente, la distribución se lleva a cabo por agentes e importadores, ya sean estos últimos mayoristas o especializados. El sistema de distribución ha cambiado de forma muy notable en los últimos años, proliferando los centros comerciales y las grandes superficies especializadas en sectores concretos: muebles, bricolaje, electrodomésticos, hogar, etc.
España e Israel: proximidad cultural
Israel es uno de nuestros principales destinos comerciales en la región de Oriente Próximo, solo por detrás de Arabia Saudí y de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), pero muy por delante de países como Egipto o Irán. En 2011, se produjo, por primera vez, un superávit de nuestra balanza comercial, con unas exportaciones por valor de 1.092 millones de euros y unas importaciones de 780 millones, lo que situó nuestra tasa de cobertura en el 139%.
Sin embargo, nuestras inversiones en el país son escasas y ligadas principalmente a proyectos y concursos internacionales, aunque recientemente se está registrando un cierto auge con la presencia de franquicias de marcas españolas reconocidas.
En las relaciones bilaterales entre ambos países (que tienen, por lo demás, una afinidad cultural superior a la de otros países europeos), lo que más se echa en falta es una mayor colaboración tecnológica. España está experimentando en la actualidad un importante desarrollo de empresas de alta tecnología, mientras ya se ha destacado con anterioridad la prioridad absoluta que para la economía de Israel representa este macrosector. Un mayor conocimiento de la realidad del país por parte de las compañías españolas podría dar lugar a una mayor presencia y colaboración dentro del gran ecosistema de innovación de Israel.
Los grandes sectores de oportunidad
ALTA TECNOLOGÍA. Precisamente, uno de los puntos fuertes de las empresas israelíes es su elevado componente tecnológico. Una confirmación reciente de esta realidad se puede apreciar en el informe de la compañía Startup Genome, publicado en noviembre de 2012 en colaboración con empresas como Telefónica o instituciones como las Universidades de Berkeley y Stanford, que sitúa a Tel Aviv como la segunda mejor región del mundo para emprender un negocio tecnológico, solamente por detrás de Silicon Valley.
Además de Tel Aviv, existen otros núcleos tecnológicos en el país, como son las ciudades de Haifa o Jerusalén, que también cuentan con un gran número de centros de investigación y empresas. Un total de 53 compañías israelíes cotizan en el Nasdaq, más que todos los países de Europa juntos. Además, Israel presenta el mayor número de ingenieros y científicos por habitante del mundo, con una relación de 14 investigadores por cada 1.000 trabajadores, hasta un 50% más que en países como EEUU o Japón.
El Gobierno israelí considera la I+D un objetivo prioritario y ha dispuesto una extensa red de programas de financiación pública de la investigación, desarrollo e innovación que supusieron el 4,5% de su PIB en 2011, cuando la media entre los países miembros de la OCDE fue del 2,3%.
En los últimos años, sectores con un importante peso en la investigación y desarrollo de las nuevas tecnologías, como son la biotecnología, defensa, telecomunicaciones, seguridad, electrónica, tecnologías de Internet, software, sector aeroespacial, nanotecnología, etc., han obtenido un gran éxito en la atracción de inversión extranjera.
INFRAESTRUCTURAS. Otro de los principales objetivos del Gobierno a corto plazo es la mejora de las infraestructuras, tanto de transporte como energéticas. Muestra de ello es el ambicioso plan de infraestructuras (ferrocarriles, carreteras, metro, puertos, aeropuertos…) puesto en marcha por la Administración Pública y que necesita de socios internacionales por la complejidad que entraña, especialmente en áreas como gestión, planificación e implementación de diseños.
Por su lado, la expansión en los últimos años de tecnologías de producción de energías limpias o la construcción de plantas desalinizadoras y de tratamiento de residuos ofrecen, asimismo, oportunidades de establecimiento e inversión.
PRODUCCIÓN Y DISTRIBUCIÓN DE GAS NATURAL. Finalmente, recientes prospecciones han revelado importantes reservas de gas relativamente cerca de la costa del país, lo que previsiblemente abrirá oportunidades en la explotación de este recurso, con fines de suministro, distribución, construcción y operación de centrales, etc. El Gobierno israelí ha anunciado que su prioridad es destinar este gas al consumo interno, aunque también contempla la exportación.
Empresas españolas en Israel
IRÍZAR. Este fabricante guipuzcoano de autocares y autobuses lleva más de 30 años en Israel, un mercado que se ha convertido en estratégico para la compañía. De entre los 90 países en los que está presente, el mercado israelí ocupa el sexto puesto en importancia. Irízar comercializa sus vehículos a través de un importador privado, M.G.B., con el que no comparte ninguna participación accionarial.
Su director de Exportación, Gotzon Gómez, distingue dos segmentos en el mercado israelí para este tipo de vehículos: el operador turístico, y los autobuses urbanos y autocares de línea. “Nosotros alcanzamos el 50% de cuota de mercado en el primer segmento (autocares de lujo, denominados también chárteres turísticos), lo que supone, en número de unidades, entre 150 y 200 al año”.
El directivo señala que “hay que tener en cuenta que el país carece de vuelos domésticos debido al reducido tamaño de su territorio, y tampoco cuenta con una malla ferroviaria significativa, por lo que la población local se desplaza principalmente en autobús o en vehículo particular. Por otra parte, Israel recibe gran cantidad de turistas, que utilizan los autocares de lujo del tipo de los que fabrica Irízar”.
Gotzon Gómez destaca la entrada de fabricantes chinos como la principal amenaza para su posición en el mercado israelí. “Estos fabricantes desarrollan una estrategia muy clara: productos de bajo coste con los que tratan de convencer a los operadores locales con visión a corto plazo y preocupados únicamente por el precio del vehículo. Nosotros, sin embargo, tenemos objetivos muy diferentes. No buscamos la deslocalización para producir barato y posteriormente invadir los mercados, sino que nos consideramos fabricantes de vehículos de alta gama, con el objetivo de crecer desde España y generar riqueza en nuestro país”.
SACYR. A través de una de las sociedades del grupo que operan en el sector del agua -Sadyt-, ganó un concurso para el diseño y construcción de una planta desaladora en Ashdod. El consorcio, en forma de joint venture, está integrado por Sadyt (con una participación del 66,6%) y su socio local Minrav, con el 33,4%. El importe de la operación es de 300 millones de euros.
Según se señala desde el grupo español, “la desaladora por ósmosis inversa producirá 100 hm3 de agua desalada al año y el proyecto tiene un plazo de ejecución de 30 meses. Su producción irá destinada a abastecer a la población palestina”.
Las mismas fuentes añaden que “la obtención de este contrato es estratégica en un mercado como Israel, que cuenta con una larga tradición en el ámbito de la desalación y con algunas de las empresas más importantes del mundo en esta tecnología. El país dispone de unas 30 plantas desaladoras (la mayoría de ellas en el área de Eilat). Las más grandes utilizan el proceso de ósmosis inversa para tratar 27.000 m3 diarios de agua salobre”.
Sadyt se dedica tanto a la gestión del ciclo integral del agua, como al diseño, ingeniería, construcción, operación y mantenimiento de toda clase de plantas de tratamiento de agua.
SOLAER. Solaer Israel se fundó en el año 2009, aprovechando las oportunidades de un mercado con excelentes posibilidades debido a su alta radiación, elevados incentivos para la producción de electricidad y disponibilidad de evacuación a la red.
María Teresa Suárez, portavoz de la dirección, relata que “en la actualidad, la firma cuenta con una oficina en Tel Aviv que atiende las necesidades de dicho mercado mediante una combinación de ingenieros locales y profesionales desplazados. Hemos construido 50 instalaciones con un total de más de 3 MW conectados. Para 2013, tenemos una cartera de construcción de un total de 80 MW, tanto del grupo Solaer como de otros inversores. Ello nos ha permitido convertirnos en una de las empresas de referencia dentro del sector fotovoltaico de Israel”.
MANUEL JAVIER ARCE
VÍDEOExperiencia en el terreno: 4 Innovation
Esta compañía española busca innovación en los mercados científicos más importantes del mundo: Israel, Singapur y EEUU. 4 Innovation nació hace cuatro años con idea de transferir conocimiento a clientes con una capacidad limitada de inversión en I+D. Su oficina en Israel analiza sistemáticamente patentes, tecnologías y start ups en busca de innovación disruptiva.
ENTREVISTA CON CARLOS MARQUERÍE, FUNDADOR DE 4 INNOVATION
"Nuestra empresa surgió con la idea de buscar tecnología fuera para traerla aquí".
2. Israel: segunda potencia en innovación (1’04”).
"Es más barato llegar a acuerdos con empresas israelíes que desarrollar tecnología propia".
3. El valor de la expectativa (1’56”).
"Israel produce ciencia, el Gobierno invierte en empresas a riesgo y después cobra por royalties...: es otra filosofía".
4. Las fronteras de Israel (1’).
"Es un país basado en el conocimiento y protege fuertemente la propiedad intelectual".
5. Tipología de clientes (1’43'').
"Trabajamos para empresas innovadoras, sociedades de capital riesgo y también para Gobiernos".
6. Un caso práctico (2’33'')
"Hemos definido la estrategia de innovación de una importante empresa energética".
SERGIO ROMERO
Documentación
Country Report: Israel
Ed. The Economist Intelligence Unit (EIU), febrero 2013, 28 págs., en inglés
Country Profile: Israel
Ed. The Economist Intelligence Unit (EIU), 2008, 28 págs., en inglés
El Estado del Mundo 2012
Ed. Akal, 2011, 624 págs., en español
Ficha país: Israel
Ed. ICEX, diciembre 2006, 4 págs., en español